Enfermedades y parásitos de las abejas

Los apicultores se encargan de inspeccionar colmenas buscando indicaciones de enfermedades, pestes y parásitos.
    Ácaros:
  • Varroa destructor: es un ácaro que ataca a las abejas de la miel (Apis cerana y Apis mellifera). La enfermedad que causan se llama varroasis.
La Varroa solo puede reproducirse en una colmena de abejas. Se agarra al cuerpo de la abeja y la debilita absorbiendo su hemolinfa. En el proceso, un virus del ARN como el “virus de ala deformada” (DWV) son transmitidos a las abejas. Una plaga o invasión grave lleva a la muerte de toda la colonia, normalmente a finales de otoño y principios de la primavera. La Varroa es el parásito con mayor impacto económico en la industria apícola. Puede considerarse un causante del “trastorno del colapso de las colmenas”.
Hongos:    
  • Ascosphaera apis suele aparecer durante la primavera, pero sus síntomas pueden verse a lo largo del año. Las esporas del hongo se mezclan con el alimento de las larvas, que acaban siendo infectadas. El hongo compite con las larvas por la comida y finalmente las acaba matando. Al principio la larva presenta un aspecto algodonoso y luego se deseca y momifica. El aspecto final de las momias será blanco o negro dependiendo de la sexualidad del micelio del hongo que las ataca. Estas suelen observarse en la entrada de la colmena, desde donde pueden esparcir las esporas del hongo a otras colonias.

  • La nosemosis es una enfermedad provocada por el ataque al intestino de las abejas de un microorganismo perteneciente al reino de los hongos. Es, posiblemente, una de las causas del síndrome de “Despoblamiento de las abejas” y de la pérdida masiva de las colonias experimentada en 2004 en España.
Cuando las esporas del hongo son ingeridas por una abeja sana pasan al intestino grueso. En la parte terminal de este, el proceso de digestión rompe la corteza de la espora y libera al microorganismo que estaba dentro, enquistado, que se fija sobre el tejido interno del intestino y se reproduce formando más esporas, a base de alimentarse de este tejido, al que va destruyendo.

Virus:
  • El Virus agudo de la Parálisis de la Abeja, de la familia de Dicistroviridae, es semejante al virus agudo israelí de la parálisis, al virus de abeja de Cachemira, y al virus Negro de célula de reina. El Virus Agudo israelí de la Parálisis es considerado una causa o factor contribuidor al Desorden del Desplome de la Colonia (CCD). Varroa y arados Traqueales aumentan la susceptibilidad a virus. El Virus de la Abeja de Cachemira ha sido descubierto recientemente y no se sabe mucho sobre él.

  • El “Virus de ala deformada” también es asociado con incinerador de Varroa y asociado con CCD. El virus de las alas deformes se encuentra actualmente ampliamente distribuido y es frecuente encontrarlo en las colonias infestadas por el ácaro. Las abejas afectadas tienen un tamaño inferior al normal y las alas presentan deformidades o se encuentran atrofiadas.

  • “Piojos de las abejas” es la denominación común que se le da a Braula coeca Nitzsch, que realmente es una mosca sin alas, que se parece y comporta como un piojo. También se conoce como mosca de las abejas. Parasita principalmente a la reina, menos frecuente en las obreras, y casi nunca en los zánganos y pecoreadoras.

  • La acarapisosis, o enfermedad acarina, es una enfermedad de la abeja adulta de la miel y de otras especies de Apis. Está causada por el ácaro Acarapis woodi, conocido como ácaro traqueal. La sintomatología de la enfermedad no es precisa ni característica. Cuando la enfermedad se agrava el vuelo de las abejas es lento y a veces imposible por la alteración de los músculos de las alas. Estas presentan una posición anormal, perpendiculares al cuerpo y caídas, como dislocadas.


Referencias:



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